El narrador y ensayista Antonio Martínez Menchén nació en Linares en 1930 aunque pasó su infancia y primera juventud en Segovia, donde su familia se encontraba de vacaciones al iniciarse la guerra civil española. Estudió Derecho y Psicología industrial en Madrid y en 1960 ingresó como funcionario público en el Cuerpo Técnico de la Administración Civil. Está casado con la pintora Jesusa Aguirre, con la que ha tenido tres hijos. Es hermano del también escritor Andrés Sorel y padre del poeta Carlos Martínez Aguirre.
Dentro de su amplia trayectoria intelectual hay que destacar dos facetas: la de narrador y la de ensayista. En la primera, a su vez, se distinguen dos tendencias: la narrativa para adultos y la narrativa infantil y juvenil. Como ensayista ha tratado temas fundamentalmente literarios, ya sea en monografías o en publicaciones periódicas de prestigio como “Cuadernos para el Diálogo“,“Cuadernos Hispanoamericanos“,“República de las letras“ o el diario “El Sol“.
Su iniciación en el mundo literario se produce a principios de la década de los sesenta de la mano del editor Carlos Barral, con quien publica “Cinco Variaciones“ (1963) y “Las Tapias“ (1968), novelas en las que apuesta por la renovación formal utilizando el monólogo interior, el flujo de conciencia y otras técnicas tomadas de autores anglosajones como James Joyce. En estas obras aparece otro elemento que será esencial en su producción literaria posterior: la crítica frente al ambiente social y cultural de la posguerra.
En la literatura juvenil el autor vuelve a tratar los temas ya presentes en su narrativa adulta, así como en sus trabajos de ensayista (“Narrativa infantil y cambio social“, 1971) y folklorista (“Cuentos populares Españoles“, 1981). Así su primera obra para jóvenes, “Fosco“ (1985), es parte de una trilogía ambientada en la Segovia de posguerra, al igual que algunos de sus libros de relatos para adultos como “Inquisidores“ (1968) o “Una infancia perdida“ (1992). También es importante en su obra juvenil la influencia de la novela de aventuras clásica, muy presente en obras como “Con el viento en las velas“ (1996) o “La espada y la rosa“ (1993).