Juan Gutiérrez de Godoy fue un eminente médico nacido en Jaén en 1579 y fallecido en Madrid en 1656. En 1610 se doctoró en medicina y filosofía en la Universidad de Alcalá. Ejerció como médico del consejo del Alcalá la Real hasta que, en 1624, fue nombrado médico del Cabildo eclesiástico de Jaén. En esta ciudad permaneció hasta 1645, durante la que fue la etapa más fructífera de su vida. Fue médico de cámara del cardenal Moscoso y Sandoval y familiar del Santo Oficio de Córdoba. A los sesenta y seis años de edad se trasladó a Madrid como médico de cámara de Felipe IV, junto a Cipriano Maroja y otros grandes médicos de la época. Allí permaneció hasta su muerte. Entre sus tratados se encuentran “Advertencias y preceptos generales con los cuales pueden fácilmente tasar cualquier receta en las boticas”, “Disputationes Philosophicae et Medicae super libros Aristotelis ‘De memoria et reminiscentia’ duobus libri” y el sugestivo título de “Tres discursos para probar que están obligadas a criar sus hijos a sus pechos todas las madres, quando tienen buena salud”, referencia a un problema de dejación de este deber materno al que han debido enfrentarse los pediatras de todos los tiempos.